Enemigos Públicos


Película de gángsters de Michael Mann, el mismo de Heat (acá estrenada como Fuego contra Fuego) y de Miami Vice. Sin embargo, no es la típica película de gángsters, y mucho menos una película de acción. Michael Mann con este filme va más allá, y retrata a un gánster de una manera diferente. Es así que este film tiene también grandes dosis de drama y romance pero sin dejar de lado el contenido policial y de película de persecución, estando cerca al género de las road movies en ciertos momentos.
Johnny Depp, en otra gran actuación, interpreta a John Dillinger, un asaltante de bancos con una suerte de "código de ética": no asalta a las personas que están dentro de los bancos retirando dinero o haciendo depósitos, sino que sólo se lleva el dinero de las bóvedas. Esto hace que las personas le tengan cierta admiración y respeto, lo que se observa en una escena en la que lo arrestan y la gente está fuera del carro como si éste fuera una celebridad, mismo club de fans. Seguramente se preguntarán: el dinero del banco es de estas personas, así que en cierta medida igual les está robando... pero hay un detalle: si le roban al banco, éste está obligado a reponer el dinero a las personas que han confiado en él para depositar sus ahorros, es como si el dinero estuviera "asegurado" (al menos esta es mi interpretación de ese rollo), pero si les robara a las personas que están en el banco antes de que depositen el dinero o después que lo retiren, el banco no tendría por qué hacerse responsable de ese dinero robado. Esto, en un contexto de la gran depresión, en la que los bancos no protegieron debidamente el dinero de las personas y que por ello pasaron a ser vistos como los malos, ocasionó el fenómeno antes citado: los asalta bancos pasaron a ser una suerte de héroes populares, sobre todo Dillinger, ya que efectuaba el asalto con calma, procuraba no usar armas (excepto que la situación realmente lo requiera) y no dejaba a sus amigos abandonados si es que había un tiroteo.
En la otra orilla se encuentra Melvin Purvis, interpretado por otro gran actor, Christian Bale. Purvis convierte a Dillinger en el "Enemigo Público #1 de EE.UU." y comienza la cacería de su banda de asaltantes de bancos. Esta fijación por capturarlo tiene un fin: convertir el bureau de investigación en lo que luego sería el FBI. Para ello necesitan mejorar su imagen y así conseguir un mayor presupuesto y un mayor poder, por lo que acabar con la ola de asaltos es una prioridad y buscan reclutar a los más capacitados para ello.
Y como nunca puede faltar una mujer, la bella francesa Marion Cotillard (famosa por su papel de Edith Piaf, el cual le significó un premio de la Academia) interpreta a Billie, una chica común y corriente pero que capta el interés de Dillinger, iniciando entre ellos un gran romance.
No cuento más sobre la película porque ya sería un spoiler, pero realmente es muy buena. Las actuaciones, la fotografía, el argumento, en fin, todo me pareció acertado. La historia fluye tranquilamente, no hay muchos tiempos muertos, siempre ocurre algo y cada acción desencadena irremediablemente otra, para bien o para mal de Dillinger.
Tres escenas se me quedaron grabadas: una en la que Dillinger está en prisión y dice que ver los ojos de los moribundos es algo que impide dormir bien por las noches, pero que a él lo que lo mantiene despierto es el café; otra en la que los policías no se dan cuenta que está entre ellos (no digo dónde ni cuando para no matarles el suspenso), y el climax de la película, muy bien logrado.
Acá los dejo con el trailer. ¡Apúrense antes que la saquen de cartelera!

No hay comentarios: