A pesar de que ha pasado bastante tiempo, considero indispensable hacer un breve comentario de estos grandes conciertos.
Primero el de Duran Duran. Llegué a hacer mi cola muy temprano, ni bien terminé de almorzar salí para allá, porque estaba en la zona de más atrás y quería verlos lo más adelante dentro de mis posibilidades. El concierto comenzó algo tarde y con una canción del nuevo disco que hasta ese momento había escuchado muy poco, pero se veía que la noche iba a ser muy buena. Poco a poco comenzaron a tocar sus temas conocidos y la gente gritaba y enloquecía. No todos los días puedes escuchar Rio, The Chauffer, Is There Something I Should Know, The Reflex, Hungry Like The Wolf y otras excelentes canciones. The Reflex fue una de las más aclamadas, todos estaban pendientes de cómo le iba a salir el "Flex-flex-flex-flex-flex" que dice al inicio, y la verdad es que le salió igualito al disco. En un momento del concierto, Simon LeBon -vocalista de la banda y todo un showman- comenzó a preguntar al público "Who's your daddy?" ("¿quién es tu papi?") y como no obtenía respuesta dijo "Do you want me to spell it?" ("¿quieren que se los deletree?") y comenzó a decir S-I-M-O-N. Infaltable también la presentación de cada uno de los músicos y de su corista Omarosa, mientras todos hacían un solo con sus instrumentos cada vez que los mencionaban, siendo el que más se lució el bajista, quien en la segunda parte del show vestía un polo de la selección peruana de futbol. Otro gran detalle fue cuando ellos anunciaron en el concierto el triunfo de Barack Obama en las elecciones de EE.UU. Sin duda, una noche inolvidable.
El Lima Hot Festival también fue espectacular, aunque lo vi de lejos porque mi entrada era en The One I Love, de la mitad de la cancha para atrás. A pesar de llegar temprano y estar al inicio pegado a la baranda que separa una zona de otra, opté por alejarme debido a la gente que empujaba bastante, cual ganado desesperado. Los grupos peruanos Turbopótamos y Cementerio Club cumplieron satisfactoriamente su papel de teloneros y demostraron que se puede hacer buena música acá y desmarcarse de las propuestas trilladas de otros artistas. Luego salió a escena Travis, con una fuerza que pocos esperaban, demostrando que en sus conciertos su música tiene mucha más energía y vitalidad. El vocalista derrochó simpatía, se bajó del escenario para darle la mano al público. Cantaron todos sus temas conocidos, entre ellos Writing to reach you, Turn, Side y por supuesto Why does it always rain on me?, con el que deliraron los fans. El turno de R.E.M. llegó casi una hora después, teniendo un gran retraso respecto a lo programado, pero con un show tan grandioso que se les perdonó la demora al minuto de iniciado su concierto, el cual desde mi perspectiva superó en calidad, tanto visual como sonora, al de Duran Duran, aunque lamentablemente lo ví desde más lejos. Las canciones fueron prácticamente todas las que esperaba: Imitation of Life, Orange Crush, The One I love, It's the end of the world as we know it (and I feel fine), Leaving New York, E-bow the letter, Bad day, Man on the moon y muchas más que suenan incluso mejor en vivo. Michael Stipe se consagró como todo un showman, cautivando al público en todo momento y bajando dos veces del escenario para dar la mano a los espectadores. En el intermedio pusieron una nota que se proyectó en todas las pantallas que decía "R.E.M. loves Perú"... y la verdad es que después de ese gran concierto, el Perú también los ama, aún más de lo que ya los amaban antes del concierto.
